Wednesday, September 16, 2020

Fundaciones jesuitas han recibido más de millón y medio de dólares de George Soros


7 de setiembre de 2020 6:32 pm | ÚLTIMA ACTUALIZACIÓN 8 de setiembre de 2020 10:11 am

Imagen referencial / Emblema de la Compañía de Jesús (jesuitas). Crédito: David Ramos / ACI Prensa.


Tres organizaciones caritativas de la Compañía de Jesús (jesuitas) han recibido en los últimos años más de un millón y medio de Open Society Foundations, la fundación del magnate pro aborto George Soros.

La Fundación Servicio de los Jesuitas para los Refugiados recibió en 2018 176.452 dólares con el objetivo de “apoyar el trabajo del beneficiario sobre los derechos de los migrantes” en América Latina y el Caribe.

Por su parte, el Servicio Jesuita a Migrantes - España (SJM – España), recibió 75 mil dólares de la fundación de George Soros en 2016 y 151.125 en 2018.

Pero la organización caritariva jesuita que más fondos ha recibido del magnate pro aborto es la Jesuit Worldwide Learning Higher Education at the Margins USA, de Estados Unidos, que obtuvo 890 mil dólares en 2016 y otros 410 mil dólares en 2018.

Esta organización es la única que en su sitio web reconoce a Open Society Foundations como uno de sus “socios”.

En total, las donaciones que ha entregado George Soros a las fundaciones jesuitas suman 1.702.577 dólares en los últimos cuatro años.

ACI Prensa ha consultado a las tres fundaciones jesuitas sobre sus vínculos con Soros y sobre su conocimiento de su agenda pro aborto, pero solo la Jesuit Worldwide Learning Higher Education at the Margins USA (JWL) remitió una respuesta.

En respuesta a las inquietudes de ACI Prensa, el 5 de septiembre la organización jesuita indicó que "solo el 3% de los refugiados gozan del acceso a educación superior y JWL está presente en muchas de estas comunidades, donde ofrece un rayo de esperanza a los jóvenes que aspiran a transformar a sus comunidades".

"En cumplimiento de la Ley de Derechos Educativos y Privacidad Familiar (FERPA), JWL no puede comentar sobre información de becas para estudiantes sin infringir el derecho a la privacidad de los estudiantes", concluyó la organización jesuita.

A mediados de julio de este año se conoció que el hoy Arzobispo de Santiago de Guatemala, Mons. Gonzalo de Villa y Vásquez, sacerdote de la Compañía de Jesús, estuvo vinculado a la desaparecida Fundación Soros Guatemala desde la década de 1990 hasta los primeros años del nuevo milenio.

Entrevistado por ACI Prensa en esa ocasión, Mons. De Villa y Vásquez dijo que “en ese momento no era consciente o por lo menos no tengo ningún recuerdo de que en ese momento yo fuera consciente” de la agenda de George Soros.

George Soros y el aborto

Open Society Foundations, creada por Soros en 1993 como Open Society Institute (OSI), financia diversas campañas a favor del aborto en todo el mundo.

En 2016 se conoció que la fundación de Soros movió 1.5 millones de dólares para callar el escándalo de Planned Parenthood, acusada de vender órganos y tejidos de bebés abortados en sus instalaciones en Estados Unidos.

En los últimos cuatro años, la fundación de George Soros ha donado cerca de 12 millones de dólares a la International Planned Parenthood Federation (IPPF), y a su brazo político estadounidense Planned Parenthood Action Fund.

En 2017, el Gobierno de Irlanda ordenó a Amnistía Internacional devolver a Soros los más de 160 mil dólares donados por su Fundación Open Society para una campaña a favor de la legalización del aborto en ese país.

Un documento de la Fundación Open Society filtrado por DCLeaks.com en 2016 reveló que para la organización de Soros era importante “una victoria” a favor del aborto en Irlanda para “impactar a otros países fuertemente católicos en Europa”.

En 2018, Open Society Foundations dio 200 mil dólares a la organización pro aborto falsamente católica Catholics for Choice, matriz estadounidense de Católicas por el Derecho a Decidir.

La revista de economía Forbes calcula la riqueza de George Soros en 8.3 mil millones de dólares.

El presupuesto de la Open Society Foundations para 2020 es de 1.2 mil millones de dólares.

Actualización 8 de septiembre a las 10:11 GMT-5: Se agregaron las declaraciones remitidas por la Jesuit Worldwide Learning Higher Education at the Margins USA.




Sunday, September 13, 2020

Leonardo Boff: la fuerza de los pequeños


Laudato Si' Revolution: "Hacia una civilización biocéntrica"Leonardo Boff: "Franciscanos y jesuitas unidos en la Revolución Laudato Sì'"


Revolución Laudato Sì'


Estamos viviendo un momento dramático en la historia de la humanidad. Esta pandemia es más que una crisis. Es un llamado a cambiar nuestra relación con la naturaleza y con la Madre Tierra, a buscar un nuevo comienzo

Científicos cualificados, invitados por la ONU, han estudiado las nueve Fronteras Planetarias que de ninguna manera deben ser superadas. Es urgente que que refundemos nuestra existencia en la Tierra

En función de esta misión común, se ha establecido una colaboración y articulación entre dos familias religiosas con sus grandes tradiciones amigas de la creación, la vida, los más desposeídos y la Madre Tierra -los franciscanos y los jesuitas-

Las dos tradiciones espirituales, ahora unidas, pueden dar los primeros pasos hacia esta necesaria transformación

11.09.2020 | Leonardo Boff


En tiempos de grandes crisis, desastres naturales y ahora, con la epidemia del nuevo coronavirus, los seres humanos están dejando que lo que es esencial para ellos pase a primer plano: la solidaridad, la cooperación y el cuidado de los demás.

Estamos viviendo un momento dramático en la historia de la humanidad. Por primera vez, un virus ha atacado a todo el planeta Tierra. Está diezmando miles de vidas, afectando a todos indiscriminadamente, pero especialmente a los más vulnerables de las periferias de las ciudades, que no pueden hacer adecuadamente el confinamiento social, ni pueden evitar las aglomeraciones, dada la configuración de los hogares, que son verdaderas favelas.

Esta pandemia es más que una crisis. Es un llamado a cambiar nuestra relación con la naturaleza y con la Madre Tierra, es decir, a buscar un nuevo comienzo, un nuevo paradigma que nos permita permanecer vivos en la Casa Común y llevar adelante nuestro proceso de civilización.

Vivimos una emergencia ecológica. El 22 de agosto de 2020 se produjo la Sobrecarga de la Tierra (Earth Overshoot). Esto significa que los humanos han consumido todos los bienes y servicios y otros insumos vitales no renovables. La Tierra entró en números rojos y en el cheque especial. Si continuamos con nuestro consumismo, extraemos violentamente lo que la Madre Tierra ya no puede darnos. Luego responde con más calentamiento global, con episodios extremos, con suelos menos fértiles, con menos agua potable y con una gama de virus que nunca dejan de atacar a los seres humanos y poner sus vidas en riesgo.

Científicos cualificados, invitados por la ONU, han estudiado las nueve Fronteras Planetarias que de ninguna manera deben ser superadas (entre ellas, el cambio climático, la escasez de agua potable, el abuso del suelo, la erosión de la biodiversidad, la alteración del nitrógeno, entre otras), ya que causarían un colapso de nuestra civilización. Como todo está interconectado, la ruptura de una frontera puede causar la ruptura de las otras y, por lo tanto, nos encontraríamos en lo peor.

Laudato Sì' nos advirtió: "Las predicciones catastróficas ya no pueden ser miradas con desprecio e ironía. A las próximas generaciones podríamos dejarles demasiados escombros, desiertos y suciedad. El ritmo de consumo, de desperdicio y de alteración del medio ambiente ha superado las posibilidades del planeta, de tal manera que el estilo de vida actual, por ser insostenible, sólo puede terminar en catástrofes " (n.161).

Es urgente que evitemos tales catástrofes, pero más que nada, que refundemos, con nuevos valores y principios, nuestra existencia en la Tierra, nuestra Madre que nos da todo lo que necesitamos para vivir.

En función de esta misión común, se ha establecido una colaboración y articulación entre dos familias religiosas con sus grandes tradiciones amigas de la creación, la vida, los más desposeídos y la Madre Tierra -los franciscanos y los jesuitas- a través del Servicio Interfranciscano de Justicia, Paz y Ecología de la Conferencia de la Familia Franciscana de Brasil; del Observatorio Luciano Mendes de Almeida de la Red de Promoción de la Justicia Social y Ambiental de la Provincia Jesuita del Brasil, y el Movimiento Católico Mundial por el Clima. El programa MAGIS y la Facultad de Filosofía y Teología de los Jesuitas (FAJE) también son socios.

Los valores de cada una de estas dos tradiciones pueden inspirarnos a nuevas formas de cuidar la herencia sagrada que la evolución y Dios nos han dado: la Tierra, la Magna Mater de los antiguos, la Pachamama de los andinos y la Gaia de los modernos. Laudato Sì' nos convoca a "una conversión ecológica global" y, por 35 veces, nos exige "nuevos estilos de vida".

En su encíclica de ecología integral el Papa Franciscopresenta a San Francisco "el ejemplo por excelencia del cuidado de lo que es débil y de una ecología integral, vivida con alegría y autenticidad. Es el santo patrono de todos los que estudian y trabajan en torno a la ecología, amado también por muchos que no son cristianos" (n.10). Dice aún más: "Su reacción era mucho más que una valoración intelectual o un cálculo económico, porque para él cualquier criatura era una hermana, unida a él con lazos de cariño. Por eso se sentía llamado a cuidar todo lo que existe... él pedía que en el convento siempre se dejara una parte del huerto sin cultivar, para que crecieran las hierbas silvestres" (n.11.12).

San Ignacio de Loyola fue un gran devoto de San Francisco, especialmente de su pobreza. Tanto para Francisco como para Ignacio, ser pobre significaba más que un ejercicio ascético, era un despojarse de todo para estar más cerca de los demás y construir la fraternidad con ellos. Ser pobre para ser más hermano y hermana.

Para los primeros compañeros de San Ignacio, la vida en la pobreza, tanto individual como comunitaria, siempre acompañó el cuidado de los pobres, una parte esencial del carisma jesuita. Y San Francisco vivió estas tres pasiones: a Cristo crucificado, a los pobres más pobres y a la naturaleza. Llamó a todas las criaturas, incluso al lobo feroz de Gubbio, con el dulce nombre de hermanos y hermanas.

Ambos vislumbraban a Dios en todas las cosas. Como San Ignacio lo expresó bellamente: "Encontrar a Dios en todas las cosas y ve que todas las cosas vienen de lo alto”. Y decía más, en línea con el espíritu de San Francisco: "No es el mucho saber lo que sacia y satisface el alma, sino el sentir y saborear internamente las cosas. Sólo se puede saborear por entero todas las cosas si las amas de verdad y te sientes unido a ellas”.

Tales formas de vida y de relación son fundamentales si queremos reinventar un camino amistoso, reverente y cuidadoso con la tierra y la naturaleza. De aquí nacerá una civilización biocéntrica, fundada en la interdependencia entre todos, la solidaridad, la cooperación y el cuidado de todo lo que existe y vive, especialmente los más desprotegidos, en una fraternidad universal.

El Covid-19 es una señal que la Madre Tierra nos envía para asumir nuestra misión que el Creador nos ha confiado de "proteger y cuidar el Jardín del Edén", es decir, la Madre Tierra (Gen 2:15). Si estas dos Órdenes, de los franciscanos y de los jesuitas, asociadas con otras, se proponen realizar este sagrado propósito, daremos prueba de que no todo el Paraíso terrenal está perdido. Comienza a crecer dentro de nosotros y se expande hacia los espacios exteriores, haciendo verdaderamente de la Madre Tierra la verdadera y única Casa Común en la que podemos vivir juntos en la justicia, en la paz y en la alegre celebración de la vida.

Las dos tradiciones espirituales, ahora unidas en la defensa y promoción de la vida y de la Madre Tierra, pueden dar los primeros pasos hacia esta necesaria transformación de una nueva relación tierna y fraternal con todos los humanos y especialmente con la naturaleza devastada y la sufrida Madre Tierra.

Leonardo Boff, eco-teólogo, en nombre de la familia franciscana.